Nadie Sabe Nada: Nadie Sabe Nada | Dr. Waters ¿qué es un chequeo?

Ser podcast.

Què, què passa, nen? Com estàs?Muy bien.

Fals inicio.Mas me has pillado.

No, era un... que passa, però de persona, eh.

Ah, ah.Venia des de Andreu, eh.

Te contesto.No des del Buenafuerte.

Ah, que pasa, no, perdona. Te contesto como persona también.

Sí, sí, sí.Muy bien.

Vale, eh.

Pues, mira, yo he tenido un microdisgusto,

porque, antes de empezar, en viene Oli,

este chaval que yo no conozco de nada,

lleva 10 años viniendo aquí,

y se cree que el problema es suyo.

¿Qué ha hecho?

¿Qué pasa, cómo está?

Es una relación con el público, fraternal, ¿no?

Sí, me interesa.

Sí, y dice, bueno, no tengáis en cuenta que es lunes.

Ostia, que no me acordaba.¿No te acordabas que era lunes?

No me acordaba, porque yo ayer trabajé...

¿Y cómo cambiaron la hora?

Debe ser eso.Hace mucho ya, porque hoy es...

Hoy es... Hoy es 8 de abril.

Hoy es 8 de abril. Sí, sí, sí.

Sí, sí, sí, sí.

Pero es que no me recupero.

Ya.

Ya, pues sí.

Tengo los ritmos circadianos.

Sí. ¿Va?

Yo no tengo, yo me los quité.

Sí.

Sí, como las amígdalas.

A mí me quitaron las amígdalas. Sí.

Sí, yo no tengo amígdalas. ¿Y qué tal? ¿Qué se nota?

Pues se nota que me soplas en la cara y me quedo afónico.

Ah, sí?

Hòstia.

Que te hacían como de filtro, ¿no?

Me hacían filtro.

Me quitaron eso...

Yo me han quitado un montón de filtros, a mí.

Sí, sí, sí.

¿Vecícula tienes?

Vecícula, yo creo que sí.

Hombre, me habrían avisado si me lo hubieran quitado.

Claro, yo que sí.

Entonces me quitaron las amígdalas y dijeron...

Mira, es que apretamos un poquito más y salió la vesícula también.

Al tirar de la amígdalas, se ve que había un cable...

Porque todas las vísceras están unidas, claro.

Ellos podrían sacártelo todo, dejarte como un pellejo.

Oye, que, mi filla, me fui a hacer un chequeo.

¿Tienes que te lo cuente ahora o en programa?

Pues decide tú, ¿cómo lo ves?

Yo es que ahora lo tengo más reciente.

Pues venga, dale con el chequeo.

Pues que me hago un chequeo, privado.

¿Que te lo hacen solo a ti, quieres decir?

No sé, ¿puedo hacer chequeo conjunto?

No, bueno, va por persona...

Para competir con tu mujer, ¿no?

No, precisamente, ya que sacas el tema,

es mi mujer la que insiste, se ve que me ve mal.

Bueno, le ven las orejas del logo. Sí, tío, pero cada X.

Ella dice que cada año, digo, cada año, no puede ser.

Convivir contigo debe ver cada cosa.

Y dice que hace un montón de años que no te haces un chequeo.

Bueno, pero estoy bien, ¿eh?

Y de no estás bien, venga, va, y también voy a hacer un chequeo,

que es muy guai, porque pagando, claro, tienes como premium.

Porque si no es pagando el chequeo, te lo hacen ya postmortem, ¿no?

No, otra.

Por las listas de espera que hay, el chequeo es...

Mira, está muerto. Como decía...

No, no, no, no.

Un amigo mío decía, a mí ya me harán todas las pruebas

en el pasello de urgencias, ¿sabes?

Te puedes hacer el chequeo tu cuñado, ¿no? No, están muertos.

No, pero ¿sabes cuando vas a urgencias

con algo inconcreto que empiezan a enchufar cosas?

Eso es gratis, bueno, gratis.

No, no, no, pagámoslo. O pagámos todos.

O pagámos. No soy de asocial, sí.

Bueno, entonces, nada, la prisa, la ansia de mi mujer,

como me quiere tanto, quiere que viva mucho.

Sí. Yo llegamos a conclusión.

Sí, claro. ¿Por qué otra razón va a ser?

No, para prepararse.

Y entonces voy y me hacen todo, te ponen como una pulserita,

os lo recomiendo, si lo podéis permitir.

Es una pulsera de todo incluido.

Sí. Todo el chequeo incluido.

Mira, tú te llevan por todos los departamentos,

donde hay un... es como Walking Dead.

Porque la gente cuando va a hacer una prueba está en una silla,

en un espacio... no espacio, no tiempo, ¿sabes aquello?

Esperando que salga tu número.

A ti te cueldan, que te sientes un poco mal,

pero un poco solo, porque como has pagado, dices, oye, a menos.

Y para poder hacer todo en un día...

Venga, venga, prueba, prueba, una locura.

Cuatro horas.

Ahora te pincha, ahora te metas por el culo, a la nariz, todo.

Todas, todavía estás sintiendo una perforación y ya van con otra.

Es que sería flipante que hicieran todas las pruebas a la vez.

Tú te pones así, como el hombre de Vitruvio,

con los brazos extendidos,

con 15 doctores y doctoras, y todos hacen...

Sí.

Y ya llegaran, ya llegaran, eso.

Eso será como la Fórmula 1, cuando paran en boxes.

7 segundos, venga, para la calle.

Y tú, hostia, me han metido el dedo en el culo,

me han sacado sangre.

Bueno, entonces me hicieron todo, cosas que han inventado,

cosas que todavía no han inventado, las probaron conmigo.

¿Qué me hacen? Te hacen un scanner.

Que bien, qué suerte.

Coño, te pasa el cuerpo por un sitio.

Como un código QR.

Te lo segmenta todo.

Las lonchas, te hacen lonchas virtuales.

Correcto.

Entonces, todo bien, todo bastante bien.

Me gustó muy...

Salto ya al día en que el médico te da los resultados.

Porque tú quieres, porque yo estaba muy cómodo.

No, hombre, bueno, para no aburrirte tampoco.

No, no, es que no...

Es loco lo haciendo.

El mejor lunes, de qué recuerdo.

Vale, vale.

Entonces, hay un día que le damos el veredicto,

como si fuera operación triunfo, ¿no?

Sigues con nosotros.

Sigues en la vida.

Y sigue viviendo para, para...

Entonces, un doctor muy amable, no en trae en detalles,

porque todavía tengo relación con él.

Y no voy a caer en el problema de hacer broma

y luego te cae a caver otra vez.

Que esto en la historia del programa ha pasado.

Vale, muy bien.

Entonces, nada, muy bien el tío.

Y dice mi mujer, que es la hostia,

porque ya la conocéis, ¿no?

Dice, no le hicieron oído de vista.

Ah, le reprochó al médico.

Bueno, le reprochó.

Le observó con los resultados,

porque él iba tramo a tramo.

Perdona, te hacen un cheque y no te hacen oído y vista,

que es, quizás, de lo más necesario que hay por el mundo.

Bueno, está bien del páncreas.

Ahora, se mete una hostia contra las falolas.

Es que no ve.

No, es que sonó, mirámos, no, mirámos.

Pensámos si ha llegado hasta el hospital, será porque ha visto.

Pues para eso está mi mujer, para observar esas cosas.

Yo no me había enterado.

Y, sí, sí.

Entonces, dice, nada, pues ahora mismo.

Y yo, como el típico que no quiere nada, se dice,

no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no.

Cunyons, ahora, ahora, entonces me voy a otro sitio.

¿Y qué te hizo cuántos dedos hay aquí?

No, te ponen un sitio y te ponen unos sonidos.

Sí, eso está muy bien.

Avísame, es muy divertido, al mínimo sonido.

Y digo, yo la voy a pillar, le voy a avisar,

cuando todavía no oiga nada.

Porque así, entonces, el rango será como más amplio.

De verdad que eso me las contó muchas veces, es tontísimo.

Como competir, intentas quedar bien en las pruebas,

pero no tienes que quedar bien.

Si tú dices que lo oyes antes de que lo oyes,

no te sale bien la prueba, ¿no?

No, me dice que estoy bien.

¿Qué quiero, yo? ¿Qué quiero?

¿Que me diga que estoy bien?

Bueno, ya lo sé, pero no lo conseguí,

porque dije, ¿cuándo lo hago?

Porque ya te pones allí, pero tú oyes un...

Sí...

Exacto.

Exacto.

Entonces, yo digo, ya...

Muy rápido.

No, no es verdad, porque no le da al botón.

Listo. Listo.

Ella es una tía muy positiva, dice, muy bien.

Te va animando muy bien, muy bien.

Y yo, ya, bueno...

La verdad es que sí.

No se puede ser competitivo en un chequeo.

De verdad es que no se puede.

Pero el disgusto vino luego.

Le paso esto a la doctora, porque está todo informatizado.

A ti te ponen los pitidos,

y en un minuto vas a tu despacho y hay una mujer que apeta un botón

y ya tiene el resultado.

Y que no falle eso, que fui yo un día a una cita

que tenía la mutua y había fallado el sistema informático.

Y la gente, unas caras de...

No sé qué hay que hacer.

Cogiendo papeles, mirando los papeles,

como si fuera la primera vez que veían los papeles.

¿Qué son estos grafismos?

Claro, claro. Y un lápiz, ¿no?

Sí, pero porque no está iluminado esta lámina.

Pues la doctora dice, bueno, muy bien, no sé qué, tienta, dice...

Sí, ui.

Estamos perdiendo... estamos perdiendo hilo, ¿eh?

¿Y tú qué le dijiste? ¿Este también?

Es plural.

Y entonces me enseñé una gráfica y dice, mira,

por tu edad se ve que con la edad se va secando,

la oreja se seca. Sí, sí.

No, no, a la por qué eso. Sí, sí, la oreja se seca.

La oreja se seca.

Que sola que verla para darte cuenta que eso...

La forma de la oreja es que vaya fantasía, ¿eh?

Dice, ¿tú estás ya en la corba previsible de bajada?

Sí.

Pero mira aquí, una bajada como de la montaña rosa,

y dice, ui, se está acelerando, ¿eh?

Hosti... Se está acelerando.

Por eso siempre pides los auriculares tan fuertes, ¿no?

Siempre le dice la Ramón.

Pujan, pujan, pujan.

Muchos años de radio, muchos más que tú.

Sí, sí, sí.

Sí, sí, sí.

Es que todo el rato tiene que competir.

Sí, quédate los años de radio.

Métate los años en el culo.

En el culo no, en el oído me los he metido.

Y nada, pero me dejo muy inquieto el tema,

se está acelerando esto, ¿eh?

Entonces me dice, acelerando, ¿qué quiere decir?

La semana que viene ya no oiré nada.

Y dice, no, bueno, tal.

Y mi mujer saca el tema, dice...

Son Antonio.

Una paratito.

Como sienta eso en una casa, ¿eh?

No hay problema.

Yo creo que todavía no estoy para paratito.

Sí, a la tele.

Sí, puedes coger llamadas, ¿no?

Sí, coger llamadas, ¿no?

Sí, que me ha dicho una señora que coge...

Tocar en la parata que es...

Coge llamadas. Seguro que sí.

Te lo juro. Y Spotify también.

Y pagar en el supermercado con él.

Sí.

Pones la oreja en la màquina, ¿no?

¡Pip, pip, pip, pip, pip, pip!

Va, sí, sí.

Pues gracias, que sepas que estoy bien.

Bueno, tengo una cosita en el... ¿Cómo se llama ese órgano?

Hostia, es que hay tantos.

¿Qué órgano?

Pues un órgano que está aquí debajo.

Un hamon. No, en el cuello.

Tiroides. Tiroides.

Una cosa que me inquieta mucho de los resultados.

Hay un médico muy bueno, muy veterano.

Bueno, te he visto unas cositas de aquí.

Esto no es nada.

O sea, ven cosas y saben que no es nada.

Que te tranquilizas y te inquietas al mismo tiempo.

Esto es nada, esto se disuelve solo.

Te disuelve solo, digo, que tengo una fería dentro.

O qué...

No, son cositas del elígado, pero esto nada.

En cambio, hay una cosita que no...

Bien, nada, bien.

Esto no se disuelve solo, ¿eh?

Dice, pero te vamos a pinchar ahí, ¿eh?

Entonces, voy esta tarde, que lo sepas,

me van a meter una aguja con un caballo en el cuello.

Ahí no reís, cabrones.

Y no sé qué harán.

Dice, no, qué hace daño.

Porque un médico siempre dice que no hace daño.

Claro que va a decir.

Pues que a veces hay cosas que te preocupa mucho y luego no son nada.

Yo te conté la mía con el bulto que me salió

debajo del grande en el año 2006.

Que sí, tío.

Esto lo conté aquí en el programa.

Te sabes hasta... No, creo que sí, pero bueno...

No, hombre, que...

No, porque luego la gente se molesta.

Hombre, es que pueda explicar lo mismo que explicó en 2009.

Vamos, vamos.

Vamos con uno grande y libre.

Venga, vamos para allá.

Pues 2006 amaneció un día y tenía un bultito debajo del...

En la base del grande.

Un bultito no más grande que la coronita roscada

con la que se le da acuerda a un reloj.

Sí, sí, sí.

Un botón de apagar y encender, ¿no?

Sí, sí, sí.

No estaría malo.

Y entonces... 2006 todavía no había empezado a trabajar contigo.

¿Ves? Es que yo curo, tengo poderes.

A ver, me lo he dicho, yo te voy a tocar los landes y te lo curo.

Tócame ahora, en previsión.

No, no.

Si estás bien, no te conoces y da.

Pero no tiene el efecto también como de...

Ya, bueno, sí, preventivo.

Valeativo, yo ya lo que necesito es valeativo.

Sí, sí.

En el lande. Vale, vale.

Y entonces, claro, me asaltó el terror.

Y yo vivía en Barcelona y acababa de instalarme

y todavía no tenía el médico de cabecera localizado.

Entonces busqué un médico de cabecera y digo,

también el primer día que vaya, la primera en la frente,

no voy a ir con un resfriado, voy a ir a enseñárselas.

Y si entré...

Y entonces le digo yo, muy tímido,

digo, no, es que me han salido un botón en el lande.

Y él estaba escribiendo,

y no levantó ni la vista de los papeles,

dijo, vamos a verlo, vamos a verlo.

Entonces yo estaba en la otra punta de la consulta

y me bajé los pantalones y me fui como para la camilla.

Haciendo el pingüino. Haciendo el pingüino.

Hostia.

Y dice, no, no, que es la camilla. Aquí, aquí, aquí.

Mientras escribía, entonces yo...

Haciendo el pingüino para donde estaba ahí.

Y aquí, aquí, aquí, aquí.

Llegó, y él estaba asentado,

entonces se la puse aquí.

Puse aquí.

Y entonces se gira...

Bueno, eh, una perspectiva, també.

No, no, la primera a la frente, vamos.

Espera, espera.

Ah, sí, s'ha entrat aquí.

Ja sé.

Com un comavista, no?

Hacía así, lo mira y dice...

Uy, dice, esto no lo había visto nunca.

Médico de cabecera.

Esto lo había dicho nunca.

Claro, que te digan eso en relación al PN,

puede ser muy agradable en según qué situación, pero...

Esto no había visto nunca.

Digo, pero me tengo que preocupar y dice, no, no, no.

Hombre, no lo ha visto nunca y sabe que no me tengo que preocupar.

No, no, es que tienen eso.

O sea, para lo que quiere sabe, para lo que no, no.

Digo, ¿y qué hago? Y dice, no.

Me he dado una especialista.

Me he dado una especialista.

Me he dado una especialista.

¿A qué especialista fuiste?

Pues un especialista en pollas moribundas.

Busquemos un término más técnico, ¿no?

Pollo logo, Pollo logo.

A la Pollería.

Pollería en Pollería.

Y este ve...

Me tumbo, este si me tumbo, lo mira,

y me dice, ¿tú eres de África o en algún país tropical?

Oh, digo, no.

¿Te gustaría ir? No te dije eso.

¿Qué haces? ¿Qué haces para Semana Santa?

Sí. Bueno, tienes vacaciones.

¿Cuándo sales del trabajo?

Se llama ahí, ¿eh? Se llama ahí.

Y digo, no, ¿por qué? Dice, no, por nada, por nada.

Hombre, por nada, no pregunto.

Me te voy a preocupar y dice, no.

Digo, ¿por qué me pregunta esto?

Dice, no, pues llevo 20 años de profesión.

Esto no lo había visto nunca. Otra vez.

Digo, ¿y qué hago? Dice, pues ve que te haga una biopsia.

Otro viaje, otro sitio a hacer una biopsia.

No me la podía hacer, es la biopsia.

Él solo la mira, pero la biopsia es en otro sitio, en otro lugar.

¿Tizó un volante?

Sí, un volante que hice a la gente mayor.

Háganme un volante, doctor.

Pero me quedé con la cosa esta de por qué lo de África.

Em pensé que era un parásito.

La mosca revienta pijas de botuana o algo.

A meter los huevos por la uretra.

Sí, sí, sí.

Y me había hecho la biopsia.

Y también dos enfermeras y un médico.

Recuerdo, avançados ahí sobre mi pene.

Se corrió la voz.

Y diciendo una vez más, a Coro, esto no lo habíamos visto nunca.

Esto no lo habíamos visto nunca.

Y yo, ya, pero...

Todo el hospital, esto no lo habíamos visto nunca.

Yo, pero me tengo que preocupar. No, no, no, no.

Yo cuando dice, los resultados llegarán en 15 días.

Tú no sabes qué 15 días.

Porque además, al tercer día después de la biopsia,

el bulto se desapareció.

Mira...

No se sintió bien acogido.

Claro, pero lo que pensé que era una larva que se había desprendido

y ahora estaba en el estómago desarrollándose y...

El gran bulto, ¿no? The big one, ¿no?

¿Y sabe lo que era? Nada.

No, no.

Porque se disolvió solo.

Igual, un vaso linfático que se ha obturado,

se ha hecho un poquito de linfas.

No sé lo que es.

Pero tiene que ser bonito. Linfas de limón.

Un refresco.

Tiene linfas, no, tenemos sweps.

Aquí no tenemos linfas, tenemos sweps.

Bueno, pues oye...

Y se acabó la cosa, pero madre mía.

Te recuerdo que todavía no ha empezado el programa.

Para mí sí, para mí sí.

¿Crees que pongamos cabecera, con Samuel, con todo?

Venga, lo que quieras.

Por cierto, me le conté el otro día, hace ya tiempo,

en el estorn del otro espectáculo.

¿Qué días hoy? Hoy es 8 de abril.

Sí, pues vení a verme.

Igual has hecho vacaciones, pero vuelve la semana que viene.

Pues vení, estoy en el coliseum, esta semana.

Barcelona, ¿no? Sí, Barcelona, el coliseum.

Pues me encontré a mi calaixa al gené, el señor que va a salir ahora.

Sí.

Lo invité yo. Sí, ya lo sé, muy contento.

Y dice, ponéis todas las voces que yo hago.

Digo, hombre, todas a la... a la vez, no.

¡No, no, no, no!

Parecería un meeting, ¿sabes?

No, pero es que me hacéis grabar cada cosa muy, muy majo.

Sí, es increíble.

Mira, me hice una foto con él y se me ve más estropeo a mí que él.

Sí.

De verdad, me hice una foto después del show

y yo estaba cansado y estamos los dos y él con esa cara de...

Sí, sí. Está increíble.

Además, Jordi Hurtado funciona como un ninja.

Siempre está escondido y aparece.

Bueno, bueno, bueno.

Yo estaba hablando con Miguel Ángel

y oigo una voz que viene, una presencia,

y aparece, ¡ah, que están las dos voces!

Es increíble, ¿verdad?

Tiene una energía, una alegría de estar a su lado.

Estuve meando con él. Sí? Sí, sí.

Qué guay.

Meando con él, meando en el mismo momento.

Sí, sí.

No cruzando a los rayos.

No, como las cajas fantasmas.

No crucéis los rayos.

Lucha de sables.

Y bien, bien, bien, lo que ya se ha marchado.

¿Dónde está Berto? Me tengo que irse con esa energía.

Es inmorta, yo lo sé.

Ahora Miguel Ángel va a hacer la voz que toque y empezamos.

Venga, vámonos.

Bueno, bueno, bueno.

Venga.

Que era l'armario de los trastos.

Que me tengo que llevar el reloj a casa, el reloj de mi suegro.

Ah, sí? Tu suegro falleció, ¿no?

Sí, pero ahora lo tenemos nosotros.

Ah, vale, vale, vale.

Vale, vale, vale.

No, pero como era un homenaje a él, ¿no?

¿Por qué ha vuelto a funcionar?

Sí, sí, el reloj. ¿Cómo unquiste?

Ya lo sé, todo el rato, todo el reloj.

Pero el reloj es para que la gente no se lleve a engaño.

Vale, vale.

Porque me dijo mi mujer, dijo, el reloj aquel día funciona, ¿no?

Digo, sí, pues que vuelva.

Vale, tiene cariño el reloj de su padre.

Que recordemos que estaba en un bucle permanente.

Sí, bueno, murió mi suegro y el disgusto se volvió locos,

tuvo un montón de tiempo y ahora ya lo ha superado.

Sí, sí, sí. Y se vuelve a casa con nosotros.

Muy bien, perfecto.

Que me muera yo y otra vez, ¿no?

Si te levantas por la mañana y ves que da vuelta rara,

es que se ha vuelto alguien, ¿no?

Ostia, qué mal rollo.

Oye, tengo un tema para hoy, lo único que me he preparado

y nada más.

Te implica directamente.

Y habla de tu pasado.

Entonces, tú me dices, Adéu, no estoy pa' hostias.

Sí, no, tú decides.

Las dos cosas, no estoy pa' hostias, pero Adéu.

Sí, necesitaría una música como de pasado.

Vamos a ver si la encontramos.

¿Me va a incomodar? No, no creo.

A mí me va a gustar. Te va a gustar.

Yo diría que te va a gustar o no te va a disgustar, ¿vale?

Música de pasado, venga, vamos a ver.

No lo había dicho antes, lo están buscando.

1974.

Nace un chiquillo.

Está bien, está bien, esta música.

Sí.

Bien, cuando seas mayor, se te gusta.

¿Me dejas que haga yo la sección o...?

Sí, bueno, presenta al personaje.

Ah, que es el verto del pasado.

Sí, pero necesitaría un poquito más adelante.

Vale.

¡Joder, papa!

Papa, es que no me entienden.

Un poquito más.

Estás muy contento, tengo 12 años.

No, hombre, porque...

Oye, ¿qué da, quieres?

Resulta que un amigo mío,

el otro día, me mandó una cosa.

Y dice, mira dónde estoy y mira qué he encontrado.

Y dije, ostras, no es sonoro, pero yo lo sonorizaré.

¿Entienden, o no? Sí.

Y...

A veces me dice, ¿entiendes o no, con cosas que son súper básicas?

A veces me dice, vamos a ir a comer, ¿entiendes o no?

Sí, se lo entiendo.

Es que si no entiendo eso...

No es verdad que me lo hace.

Pero comer no es sonorizar, hostia.

Pero que me preguntes...

Tienes miedo de que no entienda cosas muy básicas.

¿Por qué este es un reflejo del catalán?

Sí, sí.

Bastante faltón, por cierto,

porque siempre interpretas que el otro no tiene entenderas.

Es exactamente lo que decía.

Por remarcar.

Voy a sonorizar una imagen que me mandó un amigo.

¿Y la vamos a ver aquí en la pantalla?

No, la van a ver.

Los voy a mandar a los móviles.

Soy consciente de que hay gente que ve el programa en vídeo

y gente que solo lo escucha.

¿Tú recuerdas cuándo alguna vez te ha sido a hacer una foto de carnet?

No todas, pero recuerdo ir a hacérmela.

¿Cómo son esos sitios?

Los sitios bastante asépticos.

No tiene más.

Eso es lo que tú crees.

Hay un sitio en Barcelona, que interpreto que es Barcelona,

donde yo no sé ni una conciente de sí,

que me mandó la foto.

La persona que hace las fotos se guarda siempre una,

o te pide que hagas una un poco más relajada,

porque la foto de carnet no puede salir.

¿Qué pasa, tíos?

La policía no entiende la broma.

¿Vale?

En principio, no.

O si haces la mueca,

en todo momento que seguís el documento,

tenías que hacer la misma mueca.

No, no, no.

Es un fenómeno.

Y se hizo una foto disfrazada con bigote y gafas.

Esto está prohibido, no te dejan.

Bueno, pues él lo hizo.

Cuando no se acuerda, dicen... ¿Cómo?

Y él no, bueno, tiene que contar

que se disfrazó por la foto de carnet.

Yo en la foto de carnet del tibidabo

tengo el pelo rizado de una película que está haciendo.

Llevo la permanente.

Cuando bebida la hacen, vaya.

Bueno, pon la música que nos sitúa.

Entonces, la cosa es que...

Tu vas a un... o fuiste, si te acuerdas.

¿Recuerdas que fuiste en un sitio que te dijo

una vez echas las neutras oficiales?

Ara una para mí.

No lo recuerdo. Pues eso pasa.

No lo recuerdo. No recuerdo qué ocurriera.

Pues eso pasa y estás colgado en un tablón

de una tienda de fotografía de Barcelona,

donde por alguna razón

las fotos de carnes son pequeñitas

y luego hay otra medida más grande que...

Decían las de pasaporte.

¿Te acuerdas? Sí.

Se ha unificado.

Antes la de pasaporte era...

Era una más grande para llevarla a la cartera.

No, te dan copias

y la gente normalmente lo regala a las madres.

Sí, sí, sí.

Bueno, pero la de pasaporte era un poquito más grande.

A ti decidió ponerte la de pasaporte

y vamos a verla a todos ahora aquí

en esta pantalla que paraba...

Entonces...

Estamos viendo...

Bueno...

Yo estoy tirando atrás mi propia memoria

y creo que yo te conocí ya un poquito mayor.

¿Esto tendrá...? ¿Qué te puede tener los días?

Esto puede ser en la época...

No, esto es cuando ya te conocía, porque no te piden...

Yo creo que me lo pidieron porque me habían visto por la tele contigo.

Esto puede ser 2007.

2008.

Pero, como te digo, formas parte de un gran collage

que por una cuestión de preventiva

no vamos a enseñar todas las caras,

pero ya te digo ahora que son flipantes, flipantes,

o sea, mi amigo, las mandó...

Y mandó esta sola tuya y dice, te tengo que mandar el toque.

Estás rodeado de todas las celebridades

y lo más importante, de todas las que hay...

Mira, no has roto que me tengo que levantar.

A ver, la mía está...

¿La única que te toca?

Sí, puedes coger el inalámbrico,

que es un sistema nuevo que han inventado.

Que lo llevamos usando durante 10 años.

Bueno, estás rodeado de fotos que hemos difuminado

para no tener ningún problema legal,

que yo no sé quién problema hay,

ensenyar la cara de alguien, pero se ve que el mundo actual es así.

Lo vamos a respetar.

Este de aquí que te toca a la esquina es Cárdenas.

Oh!

Él decidió, hizo como una agrupación, por aquí hay deportistas.

Él los puso según los que le parecían...

Está Pau Gasol, aquí hay deportista,

y aquí están los del mundo del entretenimiento,

pero fíjate qué prioridad te dio a ti.

Te puso grande.

Me puso a mí más grande que a Cárdenas, o puede ser.

Es una figura puntal en la comunicación en este país.

Correcto.

Pues que sepas que estás en una tienda de fotografía.

Y mi cara es la de saludando... Claro.

Mi cara es la de, por favor, no quiero hacer esto.

Tengo como una media sonrisa.

La mano levantada, un qué mal, qué peña.

Vamos a la anterior, por favor.

Yo creo que debía ser esa técnica,

en la cual él decía, ya he hecho la foto,

ahora, por favor, una es para mí.

Pobre cico, mira qué joven era.

Y no estaba mejor que ahora.

Sí, no.

Estaba mal lozano, estaba más lustroso.

Sí, sí. La piel más tensa.

Sí, sí, sí. Vale.

Que sepas que estás en una tienda de Barcelona saludando a nadie.

A la posteridad, y que ya estás.

¿Sabes qué te dio yo de la posteridad? Una mierda para la posteridad.

Va, pues venga, va.

Nadie sabe nada.

Y Andréu Buenafuente y Berto Romero, menos.

Bueno, pues retomamos el programa,

seguimos en la cadena ser desde los estudios de radio Barcelona,

en un nuevo estudio remozado que hemos estrenado.

Está muy bien, muy chulo, os gusta. ¿Qué os gusta?

Sí, está muy bien.

Es gratis, ¿eh?

Y la gente, cuando no paga, dice... Sí, está bien, está bien.

¿Te parece que hagamos un poquito de consultas...

Ah, sí, home, claro.

Dice Eduardo Roivas Ray,

desde The Feral of the Caudill.

Sí. Madre mía, tío.

Esto está un poquito desactualizado, ¿eh?

Ferrol del cobillo. Ferrol of the Caudill.

Ya, ya, ya.

Ferrol de Ferrol, no tiene propietario y menos ese señor.

Sí, sí. Estoy bastante embriagado.

Ah, vale, ahora lo entiendo todo.

Estoy bastante embriagado.

Y mañana voy a trabajar.

¿Tenéis alguna anécdota sobre alguna situación en la que os habéis visto

obligados a gestionar algo importante en un estado de embriaguez resaca?

No, no, ¿por qué no?

No, yo la verdad que no.

Somos unos profesionales.

Yo nunca he venido bajo los efectos de ninguna sustancia.

¿Pero con resaca hacer un programa así?

Sí, con resaca, sí.

Y te puedo dar un dato que no quiero que cale como patente de corso.

Creo eso muy bien que es.

Patente de corso es permiso para hacer un poquito de pirata.

Los mejores problemas que yo recuerdo en la etapa...

Sí, los corsarios.

Vale, pues...

En mi época de radio, claro, tú no habías nacido todavía.

Sí que habías nacido.

¿Cuándo empezaste la radio?

En los ochenta.

Yo nací en el setenta y cuatro.

Pues aquí era un niño.

Pues aquí, en Radio Barcelona, un poco más abajo,

una especie de urmiguero, una mazmorra que viven,

nos ponían allí.

Los días que tú habías salido por lo que fuera,

25 años, Barcelona, hostia, posto olímpica,

había que hacer algo.

Pues, curioso, se cumplía una ley no escrita que es que tú estabas hecho polvo

y la gente te decía a la caba del programa o por la tarde...

Oye, te he escuchado hoy divertidísimo.

Se ve que se rompe como un freno.

A veces pasa. Un filtro.

¿Tú has hecho alguna función petado y te ha quedado bien?

Sí, petado de cansancio.

Un día que hay doble función y estoy arrastrando cansancio

y la que está más petado es la que sabe mejor.

Claro, es como un cazoncillo viejo, ¿no?

Sí, y la goma. La goma se da.

La goma se da.

Pero es peligroso, ¿eh? Pues te puede calentar la boca y la puedes liar.

Entonces, subo un poco el nivel de la autorepresión

para tener cuidado con el borracho.

Porque el borracho ya sabes que...

Ya, ya, ya.

Yo recuerdo que, como te digo, salíamos bastante

en aquella Barcelona de los 90

y teníamos una... productora, una...

Gracias, Ramón.

Sí, sí, sí, sí, sí.

Todavía nada se había construido la eixample.

Saltábamos burallas y entre el barro, los cerdos y los pastores

llegábamos a la radio con flautas.

Y entonces abríamos la tienda de campaña

y allí le dábamos a un magneto y enchufábamos la radio.

¿Qué tienda de campaña? Ah, vale, vale.

Me estoy inventando una radio medieval.

Una radio medieval, algo absurdo.

No, no, teníamos una productora que era como muy madre, ¿no?

De todos. Venga, va, va.

El programa era las 12 y media, que es la peor hora para las resacas.

Sí, sí, sí. Porque te genera una falsa confianza.

No, estoy bien, estoy bien. No.

Estás al gordo del precipicio, a las 12 y media.

12 y media, yo vivía aquí en la calle Caspe, muy cerca.

Y como le hagas casa al colega que te dice, no,

lo mejor ahora es beber un poco más.

Porque siempre hay que te dice, no, ¿me hizo ahora una cerveza?

Sí. Lo mejor para las resacas.

Un par de... tres martinis ahora.

Eso es lo mejor para las resacas.

Sólo recuerdo que ella creo que, la única que pilotaba un poco,

se dio cuenta de que cada vez que salíamos por las noches,

apurábamos más la llegada a la radio.

Menos a alguno de los del equipo, que eran personas serias,

estaban aquí a las 9 y pico.

Yo me levantaba y pensaba, hostia, el programa era las 12 y media.

Bueno, hay margen, ¿no? Sí, sí.

Pero el concepto margen, ya de por sí es abstracto, ¿no?

Y recuerdo que un día me dijo, oye, Andrés,

un día llegué a las 11 y media con el pelo así planchado,

con la boca...

Y ya cuando repití varios días, me dijo,

a lo mejor, ¿por qué no miramos esto?

Y yo, ¿qué? ¿Qué? Dice, vine, es muy pegado, ¿no?

¿Qué venías con el boletín de las noticias?

Del de las 12, ¿no?, pero igual, del de las 11, sí.

Digo, mira, se me liao, tenía margen...

Claro, claro.

Y ya, ahí corregí. Corregí, dije, hostia, se lo puede ser.

Porque sí que ibas con la goma suelta, pero demasiado.

Ya no había goma. Muy bien.

Bueno, venga, va. Vamos a ver.

¿Quieres leer tú? ¿Qué?

No sé de la pràctica, está bien. Sí, eh.

Christian W. Linares,

los perros de razas diferentes se entienden cuando ladran.

Sí, sí, sí.

Y si no, se huele en el culo que eso es como el traductor universal.

Ja està, ja està.

És su... és su DNI, és su DNI.

¿Y sabéis que la teoría que tengo yo de que por qué se huele en el culo

los perros? Es su Facebook.

¿Pero sabéis por qué? La razón principal de por qué se huele en el culo.

Porque lo tienen a altura de la cara.

Los humanos no nos solemos en el culo porque es francamente complicado.

Tienes que poner tempo, un par, bajar, tal...

Pero si tuviéramos el culo al lado de la boca...

Sí, pero tampoco nos solemos la boca, ¿no?

Al frente, te conoces a alguien, te bajas un poco la cabeza...

¡Hombre!

Andreu Bonafuente, de Reus, ¿no?

Y que ya está.

No, me gusta ese concepto.

Me dicen que tenemos alguien del público que quiere colaborar.

Que quiere oler. Sí.

Hola. ¿Cómo estás?

Muy bien. ¿Cómo te amas? Raúl.

Hola, Raúl. Nada, que traigo un regalo para Andreu.

Gracias, porque la semana pasada me sentí un poco marginado.

Es muy competitivo para él, así que muchas gracias.

Es muy competitivo. Sí, sí, es lo emocional también.

Quería contextualizarlo un poco.

Tiene que ver con una biudéctota del pasado verano en Menorca.

¿Pasandarlo todo esto? No, no, no.

No, tenemos tiempo, quiero decir.

Biudéctota tuya o mía? Ah, de él.

Yo tengo una Menorca que la de no dejar propina.

Ya la contaste, ¿cómo estás, chato? Muy bien.

Me siento a tu lado, porque el prisa lo tenemos.

Venga, a ver, dime.

¿Qué pasa? No me puedo ir un rato.

No me puedo ir un rato.

Si quieres ir al baño, siéntate, por favor, siéntate.

Nos encontramos en Vinibeca.

Sí, me acuerdo perfectamente.

Llevabas una gorra, también.

Perdona, perdona.

Perdona, es de los nombres más flipantes de pueblo que he oído en mi vida.

Menorca Vinibeca, ¿no? Vinibeca.

Es una fantasía de nombre.

Vini es... Vini es hijo de...

Sí, ya lo sé, ya lo sé.

Ibeca es que estás subvencionado.

Bueno, si no te importa, sí hablando con mi amigo.

Sí, perdón. Venga, adelante.

¿Cómo te llamabas? Raul.

El caso es que te vi a lo lejos y conseguí vencer mi timidez

y él no quería molestarte.

Muy bien.

A molestar, ¿no?

Dijiste, ¿lo molesto o no?

Va, sí, vinga.

Te vi con muchas bolsas en el suelo y esperando algo.

El típico Jobles.

Era Silvia y Joana.

Clar, te vi a venir de la compra, yo, ¿no? A lo mejor.

Yo creo que venías de alguna excursión marítima.

Ah, amigo.

Bolsas como de ir a coger un... Vale, vale, vale.

Creo.

Bolsas de barco, ¿no? Bolsas de barco, sí.

Bolsas con timones...

Sí, sí.

Bolsas con pulpo. Sí, sí.

Prestantes, ¿no? No hay algo que se llama prestante.

Se continúa, continúa.

Cable estante. Cable estante.

Cable estante.

El caso es que te pregunte.

Te puedo ayudar, ¿qué necesitas?

Oh.

¿Qué eso se ha perdido, eh?

Eso te hace una persona especial,

porque la gente le importa a todos los cojones.

Él dijo, ¿le molesto, pero también...

A pesar de molestar, quizé voy a ayudar.

Y me pregunte, ¿qué necesitas?

Y me dijisteis, bueno, primero te doy el regalo.

Sí.

Y ahora te digo la respuesta. ¿Este es el regalo?

¿Cómo gestiona el tío la amécdota, eh?

Pues bueno, buenos días preparando.

¿Y qué dije?

Primero, Miguel.

Es simbólico.

Oh, es un reloj.

Es un relocasio. Básico.

Muy básico.

No, pero lo bonito es lo básico.

El reloj no es el regalo.

Eso es un simbolismo.

Ahí tienes mi nombre y teléfono.

Sí.

Ya me imagino cuando sea el regalo.

¿Qué necesitas? Aquí tienes mi teléfono.

Lo veo venir claro.

Espérate, espérate.

Porque lo que yo te quiero regalar es lo que me contestaste.

Este es mi regalo.

¡Cállate, cállate!

Espera.

Eh...

Hombre, que está creando un clima al Raúl.

Yo lo estoy rompiendo.

Me dijiste, es...

Tiempo.

Entonces, yo te quiero regalar en forma de este reloj con mi teléfono,

parte de mi tiempo en agradecimiento

por tantos años de entretenimiento.

Hosti, ¿sabes qué me acuerdo? Sí.

Muy bonito, aquí.

Gracias.

Sí, sí.

Sí que me acuerdo, sí.

Hablamos un rato con Silvia.

Sí que me acuerdo, sí.

Es verdad, es verdad.

Yo quiero bucerar, te llamaré, nunca me habéis llamado.

Ya, ya.

No lo esperaba.

Es raro que no te llame.

Yo me cague con el buce.

Podemos retomarlos.

Podría, podría.

También lo hice en Setembre que el agua estaba fría y yo soy un friolero.

Y lo hice en Mallorca.

¿Qué Mallorca?

No es menorca.

Es menorca.

¿Qué te ha regalado?

Exactamente, yo no lo he entendido.

¿Qué te ha regalado?

Un reloj y tiempo.

El rato que has estado hablando.

No.

Hay que explicártelo todo, coño.

Raúl...

Escúchame.

Raúl deja el teléfono, por un día menor,

que yo te cojo, te llamo.

No, no lo he entendido yo tampoco.

Pero es que no se ha entendido.

Ahora me hablaría que te llamara y dije...

¿Qué quieres?

Déjame...

El regalo ha estado en fase de pruebas,

pero yo creo que si tienes algo que te incomoda a hacer,

lo hago yo y tú dispones de más tiempo.

¿Ves cómo no había explicado el regalo?

¿Qué me hace pasar por tanto tiempo?

Tiempo que es tiempo mío

para hacer alguna tarea que a ti te gusta.

O sea, desclavo.

¡Oh!

Nos inventamos otra cosa.

Yo creo que tomar un café y hablar de buceo...

Uy, eso sería...

Eso sería un regalo para mí, en realidad.

Claro, bajo el epígrafe. ¿Qué necesidad es ir?

Ay, es ay.

Buceo, dos puntos.

¿Qué necesidad de ir abajo cuando está arriba?

¿Ya has jodido?

Porque es una forma, a lo mejor, de evadirte de esta...

Ya...

Puede ser que sea preparado muy bien el regalo,

y es tiempo.

¿Quién te pondrá a prueba?

¿Tú estás en verano, en Menorca?

De hecho, me voy hoy.

Mira con la mochilita, que es la vía del tío también, ¿eh?

Tento el cariño, se va a la isla y venga.

Raúl, gracias por tu tiempo.

Gracias, adiós.

Bonito.

Clipante.

Señor. Clipante.

Es que también es una responsabilidad,

la de las personas que somos conocidas.

Cada vez que tenemos una interacción con alguien,

para nosotros es una interacción más en el día,

pero para esa persona es un recuerdo que se va a llevar imborrable.

Y hay días que yo no sé reaccionar.

Ya ha pasado antes de entrar con una señora que está ahí.

Hola, ¿qué tal? ¿Cómo estás?

¿Puedo ir a hablar con ella? Sí.

Ahora tiene envidia porque...

No, yo interactúo y ahora él también quiere.

No, que no es envidia, pero me ha quedado la cosa.

Porque... ¿Cómo te llamas?

Mira, la actitud de ella... ¿Cómo me has saludado?

Pues yo he entrado y, claro, yo entro normal.

Porque tenía un poco de sueño también.

Y ella ha entrado con una energía muy distinta a la mía.

Ha dicho... ¡Helto! ¿Qué vas a decir?

¡Hola, Herto!

¡Hola, Herto! ¡Mucho cariño!

Y yo no he reaccionado igual, he dicho...

Hola, hola. Y ya está. Perdóname.

Acá o sí, esa gente... No entiendo todo.

Entonces, te devuelvo ahora la misma energía.

¡Hola!

¡Qué tal, Herto!

Sí, señor. Ya está, ya está.

Seguimos adelante, en la que se ve nada,

improvisación en estado puro.

Eso se decía antes, ¿no?

El programa decía una voce de improvisación en estado puro.

Orca... Orca... Orca...

Orca. Llámale Orca. Orca Tomás.

Llámale Orca, la ballena asesina. Orca.

La ballena asesina. Federico García Orca.

Exacto.

Hola, Herto y Andreu. Pregunta. Hola.

Si el cuerpo está a 36,5 grados,

¿por qué cuando el aire está a 30 grados tenemos calor?

No deberíamos tener frío, ya que son casi 7 grados menos.

No le falta razón a esta persona.

No le falta ninguna razón a esta persona.

No, si es verdad.

Teníamos que estar a 36 grados normal.

Normal. Calor a partir de 40 grados.

Exactamente.

Esta es una realidad, esto no tenía de puta madre.

Vamos a pasar de puta madre.

Oye, que dice que este verano va a hacer la misma calor

en femenino que el año anteriores.

Mira, es que es programa de humor.

Si entramos en este tema, vamos a poner tristes.

Hacemos un especial climático.

Es lo que estaba diciendo que creo que no es buena idea, pero...

La vida es así.

No sé cómo tomarme el hombromo, esto. A mí me preocupa.

Es que me preocupa.

Climate change. Climate change.

A new challenge for humanity.

Fíjate si es importante que la hago en inglés.

Sí, sí.

La gente, ¿qué dice? Pues a ver, estudia, coño.

¿Cómo lo ves? Yo estoy acojonado.

Pues es lo que te decía.

Yo fui a Madrid un día en agosto.

La calor apretaba.

42 grados.

La gente te decía, hola, buenas tardes.

Como cuando miro la pizza en el horno a ver si está hecha,

¿sabes lo que abres el horno si te entén las largafas?

Pues todo el rato.

Madrid era un horno con la pizza, con la puerta abierta.

Cojonante. El alquitran se estaba poniendo a punto de nieve.

Sí.

Sí, sí, horroroso.

Mira, qué gracioso está haciendo esta parte.

Y me dice un amigo mío, siempre intentando ayudarme.

Sí, un amigo me dice, he escuchado por la radio,

que ha dicho un especialista que nos preparemos que viviremos los 50 grados.

Digo, eh, da mierda, dija, hombre.

50, Marte. Marte.

Yo me estoy deprimiendo.

No hay comedia, ¿no? No hay comedia.

No nace, ¿no? No nace.

Tirar las semillas y se quema, ¿no?

Se quema la semilla de la comedia.

Estoy jodido con esto.

Quedo totalmente inoperante con el calor.

Es una cosa...

Yo soy de frío, yo nací en octubre.

Yo nací cuando el mundo muere.

Claro.

¿Sabes? Cuando el mundo... Entonces nací yo.

Sí, te notas.

Bueno, tienes ese punto.

De un lado lunar muy acentuado.

Claro, lado lunar.

¿Quieres ver mi lado lunar? No, no, no.

¿La cara oculta?

¿Me quieres enseñar la cara oculta?

Que no nos hemos contado.

Fuimos mi amigo y yo a ver a Roger Waters.

Sí.

Vamos a ver un especial psicodelia.

Un especial psicodelia rock, psicodélico.

Venga, música de psicodelia, Ramon.

Venga, a ver, buscons.

Ojalá viérais las caras de Ramon.

Los movimientos de cabez a cabez que pel culo abuso.

¿Qui será algo?

Vamos a acabar el programa de ella haciendo una crónica de...

Bueno, una crónica, un comentario del concierto de Roger.

Roger Waters.

Que estuvo también en Madrid dos días y en Barcelona uno.

A ver...

No, no, esto no es psicodelia, no.

Sí, sí, me meto yo a la psicodelia.

No la compro, no la compro, no.

Yo te la completo.

Pongue la base, pongue la base.

Mira, mira.

Quita, quita, quita.

Això és un joc que la dà un ictus.

Con todo el cañiz, con todo el respeto.

Yo quiero...

Prefiero algo neutro,

atmosférico.

¿Por qué no te la traes tú la sintonía de casa?

Que sea la que te guste.

De haberlo sabido, de haberlo sabido, lo hubiera traído.

Sí, sí, es todo para porro, de para porro.

Me gusta, eh.

Hòstia, no, me voy a acelerar para porro.

No, no, no, no. Si trabajamos, trabajamos bien.

Esperamos, Roger Waters no tiene prisa.

No, no, no tiene pida. 78 años.

Madre mía, ¿cómo está?

Bueno, venga.

Podríamos pasar psicodelia,

porque mira, por qué es lunes en nuestros corazones.

Sí, ahora sí, ahora sí se puede hacerlo del ictus.

Cuando lo haces tú, queda puta madre.

Venga. Bueno, Roger Waters.

Concierto en Barcelona.

Señor de 78 años.

Leyenda, leyenda.

Leyenda viva, leyenda todavía viva.

Pero la conclusión que sacamos nosotros.

Ticho con todo el respeto, a la gran herencia,

que dejará este hombre y el legado.

Ya no está para conciertos.

No sé, yo sí estoy muy de acuerdo, ¿eh?

Perdona, por qué Roger Waters.

Se llama José María Ramírez.

I vas i li dices, José María.

Pero, tío, pero... Gracias.

No, pero estuvo cantando bien, todo.

Alguna hacía...

¿Qué hablamos tú y yo?

Que todos los cantantes a los que se hacen mayores

empiezan a cantar el rango se estrecha

y canten igual Dylan, Sabina, Roger Waters.

Todos te los cambia y no te enteras.

Bueno, por el idioma, a lo mejor.

Sí, sí, sí.

¿Qué pasa? Hace un gran despliegue.

No sabéis lo de luz que chupa eso, ¿eh?

La electricidad que gasta el tío, madre mía.

Uy, uy, uy.

La entrada es cara, claro.

Que también es un poco flipante, porque la entrada es muy cara.

Y luego está todo el concierto haciendo programas

contra el capitalismo.

Y tú estarás pensando, si estoy a tope con esto,

pero la entrada era muy cara.

No, no, que sí, que sí, claro. No entiendo.

Todos somos contradictorios.

A llegar a casa apunten un papel. Roger Waters te hace sentir bien.

¿Pacordarte que ha sido, no? Sí. Puse.

Roger Waters, sí, fui.

Escúchate, Filipollas.

Me llamo Andrés, bueno, fui.

A ver si te doy...

A ver si te doy con el martillo neumático, ¿eh?

Puse. Roger Waters.

Sí.

Te hace sentir bien y mal al mismo tiempo.

Ah, ¿qué? ¿Ahora qué? Sí, sí, sí.

Soy senil, ¿no? Que va, no he hecho nada.

Año... ¿Por qué puse eso?

Pues porque te gozas de todo el gran legado psicodélico

y visual y tal, pero lo que te cuenta...

Venga, guerras, que pones vídeos de cómo matan a la gente.

Yo lo pillé... No sabes cómo ponerte.

Lo pillé en un renuncio.

No te lo dije, pero lo pillé en un renuncio.

Me pudiste decir nada, pero no se podía hablar.

No, hombre, claro, el volumen.

Es que gastaran ahí.

La factura en vatios.

Que coge...

Mira, mira, psicodèlia. Ah, estaba pensando.

¿Quién hace ese ruido tan molesto?

Sube la música, mira.

Sube la música.

Sí, que ganas de tomar el SD, ¿eh?

¿Cómo apetece, eh?

¿Cómo apetece, eh?

Está apretando un...

un martillo de goma.

¡Además, Dios mío! ¡Hey, you! ¡Hey, you!

¿Es cómo estar allí otra vez, eh?

Tanta pantalla y tanta hostia.

Un martillo de payaso.

Que sacó un cerdo que vuela.

Ah, sí, sí.

Pero el cerdo que vuela... Con drones.

Claro, con drones.

Los drones lo van moviendo y los de lo controlan perfectamente.

Pero, claro, hay un momento del show

que él protesta contra los drones,

que son los drones que tiran bombas.

Y entonces pone FAC drones en la pantalla.

FAC drones. Y yo otra vez pensaba, FAC drones,

los que te interesan, FAC...

Pero los que te controlan en cerdo,

de eso no dice nada, Roger Waters.

De los drones que controlan en cerdo no dice nada, Roger Waters.

Lo dice así, que no se entendieran.

De los drones no dice nada, eh, Roger Waters.

¡Pues va! ¡Hombre!

¡Hijo de puta!

Había que estar allí, estuvimos bien.

Una persona del público quiere tomar la palabra, adelante.

Con ella vamos a acabar. Hola, ¿qué tal?

Me se oye. Vamos a acabar contigo.

Me se oye, me gusta mucho.

Te se oye. Se te oye.

Bueno, no sé si estáis al tanto de que en Barcelona

hay ciertos barrios que llevan bastantes meses de obras.

¿Qué dices? ¿Cómo puede haber ocurrido eso?

Justo antes de las elecciones, ¿a quién se le ocurre?

Dejémoslo en que puede ser una casualidad.

¿Qué idea loca es esa?

Están delante de casa nuestra y, bueno, he mezclado...

Casa nuestra, venc.

Me he parecido al Vasco, eh.

Sí, parecido al Vasco.

De casa nuestra.

De casa nuestra.

Tiene muchos idiomas en la carta.

Yo he mezclado lo que vendría a ser la obra de...

Obra mayor, obra mayor, obra pública.

La obra mayor con la obra de arte,

que le he dado yo mi toquecitos, soy artista multidisciplinar.

Hosti, com una... Yo quiero eso también.

¿Cómo se hace?

Yo sé que me he inventado el nombre,

porque hago cosas diferentes y digo, será artista multidisciplinar.

Pero la gente se queda pensando...

Es mucho mejor de lo que realmente es, pinto piedras.

¿Qué haces? Pintas, es pintora...

Sí, un poquito de restauración, de mueves...

Pinto piedras de gente y de pobre muchacha.

Sí.

Pero artista multidisciplinar.

Exacto. Hay que saber venderlo un poquito.

No sé cómo hacerlo, pero estoy un poco bloqueada.

No, vamos a ver, vamos a ver.

¿Cómo te llamas? Dasha.

Dasha la pinta, piedras.

Estamos en el último minuto.

¿Te podrías desplazar al espacio de Dasha?

Sí, voy a dejarme a su espacio.

Seguramente debe llevar.

Hay uno para que alguno y pesa un poquito, ¿vale?

Este es para tíberto.

Hosti, esto pesa, es piedra.

Este es para Andreu.

Voy a volver con unas piedras.

No me esperaba yo tener que cargar piedras hoy, mira.

Bueno, es como una especie de trofeo, de premio...

Como estábais hace un tiempo con el Ondas...

Hay que sacar más premios.

Sí, hoy es muy bonito.

Y este es el premio, como es el público.

Esto es la baldosa típica de Barcelona, ¿vale?

¿Cómo le llaman esto?

El panot, el panot.

Que bonito, Dasha.

Esto lo ha robado de una obra.

Empecé así, pero luego encontré un mayorista...

Ah, vale, vale.

Es muy bonito, lo ha pintado como colores del nadie.

¿Tienes texto detrás?

Están personalizadas cada uno.

Gracias por inspirar mi vida y mi arte, soy el chatarrero.

Te leo lo que por el mío.

Te leo lo que por el mío que está personalizado por él.

Gracias por inspirar mi vida y mi arte, soy el chatarrero.

Ah...

Mira, mira.

Leo por aquí, muy rápido.

Las ballenas comen... krill!

Claro, es que os habéis fijado en la única parte que es igual.

Los personalizados son frases míticas,

que tenéis 800.000 míticas, pero...

Estoy rodeado de gente perturbada.

El wasabi es el popper de la alimentación.

El fracasado como prezoso.

¿Ustedes creen que se puedan pelear?

Rúcula la hierba de la de sazón.

Y el domingo que viene actuó en Caratayuz.

Muy bien.

Gràcies, Dasha, un abrazo.

Molt bonito, de verdad, gracias.

Hasta la próxima semana.

Acabas de escuchar, nadie sabe nada.

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