El Partidazo de COPE: Los mejores viajes y experiencias con la F1 y los pilotos más juerguistas, en el 'Soufflé'

¡Arranca el gran premio! ¡Los tres juntos! ¡A la frenada! ¡Ruida, rueda los dos!

¡Las cladas que van a arreventar! ¡Ruida, estrada! ¡Fantástico, fantástico!

El suflet, en el partidazo de Cope con Antonio Lobato.

El otro día, cuando Vilda declaró...

No me acuerdo quién declaró en la Fiscalía, o en la Oficina Nacional y tal,

cuando dijo que Vilda que había ido a decirle al hermano de Yeni Hermoso,

que a ver si rebajaban un poco el suflet.

Dijo yo, mira, hasta ahí ha llegado la expresión del suflet.

¡Mandan arices que en el avión de vuelta donde se produjo todo el libro!

Hola, Carlos Miquel, muy buenas.

En este caso, espectador de Lobato.

Hola, Lobato, muy buenas.

¿Qué tal? ¿Cómo estás, Juanma, Carlos?

Muy bien. Te escuchan todos.

Ha quedado todos porque les he dicho que les va a molar hoy escuchar a Lobato y a Carlos Miquel.

Que no tenemos gran premio.

No hemos tenido gran premio el fin de semana, pero tenemos el próximo.

Hay tres seguidos. La Gira de América, Austin, en Texas, México e Interlagos.

Eso es lo que tenemos.

Esta es buena gira, ¿no?

Está bien, está bien.

A mí, a Austin me gusta mucho por la música, porque es la capital de la música de esa zona.

La Calle 6.

La Calle 6, con música en directo, con mucho rock.

Así, ¿eh?

Sí, sí, está muy bien. Tiene mucho ambiente, cosa que no se ve en todos los sitios.

Si yo fuera, o si no estás escuchando, un tío que tiene pasta y tiempo.

Y dice, voy a... Por ejemplo, Luis García...

Luis Agonzalo.

Luis Agonzalo.

Al azar, nada.

Agonzalo miró.

Agonzalo miró.

Luis García Rey.

Rey, Rey.

A ver, pasta y tiempo. Y dice, oye, Lobato, voy a ir a cinco grandes premios de Fórmula

1.

¿Qué cinco grandes premios tiene que ir para, primero, disfrutar del gran premio, segundo,

disfrutar de la ciudad donde sea, donde haya marcha...

Buenas noches, buenas copas.

Buenas noches, buen ambiente.

No sé, en general, o sea, que tú digas a tu amigo cinco sitios a los que ir del circuito

de Fórmula.

Claro, pero no me lo digas por la pasta, porque, claro, depender del nivel de pasta...

No te preocupes, no mires la cartera, no mires la cartera.

Yo te digo los que a mí me gustaría más.

Pero es que tú a lo mejor es porque hay una roga y haces escalada, o sea, no...

No, no, no.

Pensando en el aficionado medio, que me gusta ver carreras, buen espectáculo, buen ambiente,

pero que además puedes aprovechar el resto del viaje para hacer otras cosas.

Venga.

Incluso si quieres ir con tu pareja, con tu mujer, con tu novia, para que puedas disfrutar

no solamente de los cochecitos, de otras cosas.

Yo siempre tengo una terna que, ya sé lo que me vais a decir, para mí el favorito Australia,

Melbourne, número uno, porque la ciudad es una pasada, el circuito está en la ciudad,

la marcha es increíble y además sueles pasar del invierno español antes arrancaba la temporada

ahí al veranillo de Australia.

Número dos.

Pero, espera, perdona, Melbourne tiene pinta de que es hipercaro, o sea, no es, mira,

para Carlos Miquel, bueno...

Bueno, es que es distinto.

No, no, no.

Estamos ya provocando.

No, pero que tú eres más rata que, claro, tú quieres ir allí y comer a nuestro espagueti

a 12 pavos y eso no puede...

Ya vamos a entrar en falta, no, pero que es verdad que es carillo, sobre todo para la

calidad de la comida.

Vingapur, Mónaco, incluso Italia es más caro ahora que Brasil.

Melbourne.

Melbourne, número uno, vale.

Número dos para ti, lo bato.

Canadá, Montreal.

Joder, mira, nunca hubiera dicho esos dos.

Uf, pues estos son una pasada.

¿Por qué?

Es una pasada si te gusta algo más que las carreras, porque si te gusta mucho las carreras

entonces te mando a Bélgica o te mando a Monza o te mando a Silverstone, pero te vas

a mojar y luego cuando acaba la historia pues te tienes que ir a las hogueras, a los cuatro

bares que hay, pero no hay juega, no hay ciudad.

Se come bien en Montreal.

Sí, sí, sí.

Había un restaurante muy famoso que lo han cerrado, ¿te acuerdas, Carlos, el que se

llama el cola de caballo?

Cola de caballo que te atendían, te atendían modelos, es verdad.

Sí, y te pegaban unos palos.

Y te pegaban unos sablazos.

Chicos y chicas.

Chicas.

Chicas.

Fue naturalmente.

Machismo.

Y había un machismo.

No, no.

Lo habrán cerrado por eso.

Lo habrán cerrado por machismo.

Es verdad que era un poquito caro, estamos hablando de 90 a 100 por persona.

90 a 100 por persona.

Sí.

Claro, no volviste.

No, yo comí de ahí.

No hace nada.

Viste una vez.

¡Vaya fama!

Tú no hace nada, Carlos.

Ya estábamos.

No pasaste ni por la puerta.

Estábamos dentro, yo he comido ahí y hace nada, está muy rico.

Tiene unos filetes de carne de vaca envejecida, riquísimos.

¿De verdad?

Ya conocí la carne esta que hace una hora, que está madurada y tal, envejecida.

La primera vez que lo vi, lo vi ahí en Montreal.

Vale.

Número uno, Melburne.

Número dos, Montreal.

Número tres.

Budapest, probablemente.

¡Oh, morir!

¡Oh, esa!

Claro.

Esa, esa.

¿Qué te pasa a ti en Budapest?

¡Qué te pasa a ti en Budapest!

¡Qué te pasa a ti en Budapest!

Esa, esa.

Estaba pensando en lo de antes del rector así.

Budapest, a ver, es evidente, ¿no?

Que es una ciudad impresionante.

Sí, sí, sí.

Está cerca también el circuito y el ambiente en la ciudad es una pasada, ¿no?

Y es una ciudad monumental, es una ciudad que tiene una historia increíble y que merece

mucho la pena.

Y además es de las más baratas, porque ahora viene un triplete de carreras, lo que nos

contaba Carlos, de Estados Unidos, México y Brasil, y luego Las Vegas.

Bueno, de las cuatro, estas que acabo de nombrar, tres están en el top cinco de entradas más

caras de toda la temporada.

Número uno, por supuesto, es Las Vegas, que es súper, súper caro, es una locura, se

le ha ido mucho a la pinza y va a ser un espectáculo, pero va a ser muy caro si quieres

estar ahí.

Pero para mí esas tres que te he dicho son las mejores.

¿Tus tres, cuáles son?

Bueno, yo en Melbourne, coincidido, me gusta mucho, pero…

Número uno, Melbourne para ti?

Sí, para mí también.

Es un sitio maravilloso, ahí buen rollo, hay periódicos antiguos, llenos de un montón

de páginas.

Hay playas.

Es como el siglo XX.

Es maravilloso.

¿Tú crees que alguien va desde España a Melbourne para ver periódicos a periódicos?

No, pero como soy periodista me gusta.

Que no vayan con Carlos, Miquel, por favor.

Ya te digo, por favor, si lo que le digo yo a alguien que se gasta 2.000 y pico euros

en un billete de aviones, que se va a encontrar con periódicos antiguos en Melbourne…

Yo estoy reservando.

… para el sobas a la biblioteca nacional…

Es verdad que tiene un clima complicado.

Yo te creo de la biblioteca.

Qué más cosas que no nos podemos perder ahí por allí.

No, no, no.

A ver, tiene, sobre todo, tiene una playa maravillosa.

Una colección de sellos.

Sí, sí.

La playa está así de Quilda.

Cómo lo tomáis, eh.

Está bien.

La playa está aquí de la maravillosa, el río Yarra.

Bueno, tiene un casino que está muy bien también para que le guste el juego,

que he jugado yo y he ganado.

Yo también.

Tú también ganaste.

Ah, bueno.

El método.

Número 2.

Y luego, número 2.

Yo pondría Monaco.

Monaco.

Porque cuando…

Mira, a Lobato no le gusta nada.

No le gusta nada.

Pero es que cuando vamos a trabajar…

El superior gran premio el más…

Pero va a trabajar.

El 2 para ti es el último para Lobato.

Es que si vas a trabajar no es recomendable.

¿Por qué?

Porque es muy difícil.

Pero si vas…

Porque el pado que es el más cutre de todo el mundial.

El pado que es cutre.

Incómodo.

Todo es incómodo.

Los parlados.

Es muy difícil moverte, aparcar.

La policía.

Los gendarmes que son y soportables.

Es lo que te gusta y Carlos.

¿Qué te gusta?

No, no.

A mí lo que me gusta es que…

Hay unos diarios.

El lujo.

No.

Hay periódicos viejos también.

Periódicos nuevos.

No sé si me habéis entendido lo que me refería, pero os ha hecho.

Venga, dale.

En el 2.

A mí me gusta mucho de Monaco como espectador, que es donde ves los coches más cerca.

Tú ves pasar los coches a los 150 km por hora, terquísima.

Además, tienes mucho más ambiente que en otros sitios.

Tienes todo el ambiente del mundo.

La costa azul es maravillosa.

Tienes noche…

Es barato también, Carlos.

Es caro de narices.

Pero al final…

No, pero te puedes ir a Niza, que es un poquito más económico.

Es más normal.

O a Irona, si haces un poco más de…

Pues ya pasas pormigo.

Yo te digo, mi mujer estuvo en Monaco viendo el gran premio y disfrutó mucho.

Y no es aficionada a las carreras.

Pero bueno, al final, yo creo que es un gran premio especial.

El número 3.

El número 3, yo colocaría otro que…

Yo es que soy un poco clásico.

Monza.

Para mí, Monza, ¿por qué?

Porque tiene la ciudad muy cerca, con lo cual tienes la posibilidad de una gran ciudad al lado,

se come de maravilla y es una carrera también con mucho sabor y muy espectacular el gran premio.

Y luego, de fuera de Europa, a mí me gusta, si quieres, gastar pasta,

que decías que un millonario.

Singapur.

Singapur.

Singapur es magnífico.

Tú te vas por la mañana de tu ritmo.

Muchísima ganas de conocer Singapur.

Bueno, pues es una ciudad que tiene todo.

Es carísima.

Es una cosa escandalosa.

Es carísima.

La hamburguesa…

Nosotros íbamos a un sitio que se llama…

Bueno, a un 24 horas en el Hotel Conrad,

que era un único sitio donde se podía cenar,

porque allí vives de noche.

Y allí hacíamos unas tertulias del Conrad.

Las famosas tertulias del Conrad, que nos juntábamos

y estábamos allí despotricando diciendo cosas que no se pueden decir en público.

Para eso nos reuníamos.

Siempre jugamos con la idea de retrasmitir las tertulias del Conrad,

porque se hubieran echado probablemente…

Si no nos echaron el tertulio todavía…

Efectivamente.

Ahí teníamos… La hamburguesa ahora mismo está en 50 pavos.

Bueno, la cerveza más cara de mi vida la pagué ahí, 24 pavos.

24 euros es una cerveza.

Yo te digo, ¿ya hay sitios en Ibiza?

Ibiza, Ibiza.

En Madrid y en Marbella.

En Madrid.

Sí.

Sí, sí.

En Madrid.

24 euros.

Una cerveza.

Una cerveza.

¿Cuánto cuesta en el Florida?

¿Cuánto me dices tú?

No, en Florida no.

10 pavos, 10 pavos.

No.

¿Dónde?

Vale, 25 entrar con una copa, 35 con dos copas.

Mira que bien lo sabes esto.

Sí, la verdad es que esta parte no es eso.

No, no, no.

Y la cerveza…

Cero comenta para su novela.

Sí, para los periódicos antiguos.

Sí, claro.

Y la cerveza 10 pavos.

Vale, vale.

Yo creo que en algún hotel de lujo y tal te pueden meter un clavo así.

A ver, los pilotos más jurgistas que hayáis conocido.

Quimi.

Quimi, Quimi.

Raikonen es el que se lleva con mucha diferencia.

Mejor.

Hamilton, ¿no?

El más perjudicado que he visto en mi vida ha sido Quimi.

No, pero perjudicado dices after.

Es decir, después de…

Durante, durante.

No, es que le vimos en una…

A ver, a Quimi se le ocurrió en un barco en Budapest, precisamente.

Sí.

Que está entre las mejores carreras también porque tiene noche.

Yo creo que la noche también es importante para idearse un poco.

Bueno.

Si se puede, si se puede.

Yo no le doy mucho valor, pero sí.

Pero bueno, el caso es que se le ocurrió…

Adrián Huber me dice que Quimi y Raikonen sin duda.

Me estás escribiendo.

Ah, mira.

Se le ocurrió coger una de sus mayores melopeas públicas en un barco lleno de periodistas.

Él llevaba el sello del reservado.

O sea, tipo orange.

Tipo orange.

Era quiche.

Y entonces tenía…

La gente de McLaren le llevaba a los lados.

Pero en realidad le sujetaba.

Para que no se bajara, porque el reservado estaba en la planta arriba de un barco.

Allí encima del Danubio.

Para que yo no sé…

Porque el barco, al principio, se movió.

No sé de ese rato que te arriba.

Pero el caso es que para bajar las escaleras le ayudaban.

No, no.

Y se hacía fotos con todo el mundo.

Toda mi equipo de, entonces, Tele5 se hizo una foto con él.

Porque se abrazaba todo el mundo.

Así acabó perdiendo la cartera, el pasaporte esa noche.

Perdió un montón de pasta.

Sí, sí.

O sea, este era el más jugador.

¿Y hay alguno así más?

Luego hay otros que la…

No estaba mal.

Irvine.

No eran tan públicos.

Pero, por ejemplo, masa, un arriquelo, fisiquela…

Estos eran jugadistas.

Eddie Irvine era…

Bueno, Irvine en su momento.

Y claro, nos vamos más atrás y James Hunt ni te cuento, ¿no?

Sí, sí.

Lo que pasa es que ya es Hunt.

Hay una película buenísima.

Sí, buenísima.

Una con la lauda.

Buenísimo.

Buenísimo.

Pero, claro, el asesor de la película era lauda.

Entonces, no solo salía Hunt en esa época.

También salía lauda, salía Street Watch, salían todos.

En los 70 era otra cosa.

Los sábados se salía por si luego no volvías a casa el domingo.

Esa era la mentalidad de los 70.

Oye, una cosa que me preguntaba hoy, yo seaba en la redacción, Antonio,

es si alguna vez has pilotado un Fórmula 1…

Dos veces.

Dos veces.

Sí.

La primera vez que fue en Barcelona, que me dejaron dar 11 vueltas,

lo que pasa es que los tíos no me dejaban hacer las 11 heridas.

Y va por bloques.

Porque el peligro de probar un coche así es que te puedes venir arriba.

Cuando vas cogiendo confianza y puedes acabar mal.

Y entonces, bueno, día 11 vueltas.

Es una sensación…

No sabría definirlo, porque la gente te dice,

pero corre mucho.

Sí corre mucho en la recta,

pero el problema es que tú no eres capaz de hacerlo y funcionar.

No eres capaz de meter los neumáticos en temperatura,

con lo cual en las curvas tienes que ir con mucho cuidado.

Y sobre todo lo que recuerdo es que frenaba muchísimo, muchísimo.

Pero así como he probado otros coches, otros monoplazas,

he probado el Audi que ganó en Le Mans en el año 2014.

Y son más conducibles y puedes buscar más el límite.

El problema es que con un Fórmula 1 te quedas legísimos del límite,

muy lejos, porque vas demasiado despacio para el coche.

Y yo he estado, lo he probado, he probado veces Fórmula 1.

¿Tú te has metido en un Fórmula 1?

Sí, claro.

Lo dudas.

El caso es que...

Pero en serio, el cópito es muy estrecho.

Pero que he entrado en el cópito porque está preparado para...

No es un asiento 8 a medida, es un asiento grande,

para que pueda entrar gente más corpulenta,

porque son fórmula 1 para eventos.

Entonces, pero bueno, que yo, por ejemplo,

los dos que me he llevado, uno tenía 700J, otro 650.

O sea, que ya da para correr un poco.

Y con uno acabé cruzando a la salida de una curva.

Pero claro, el problema es que ese evento,

que ahí hay cinco vueltas de circuito bar,

acabó con un piloto llevándome en un Fórmula 1 biplaza.

Ah, sí, eso lo he visto.

Sí, sí.

Entonces, claro, la sensación que te queda,

de que no vales para nada,

de que ha sido parado.

Algo que haces.

Si este amigo mío, qué rico, imaginario,

quisiera probar un Fórmula 1,

¿esta disposición para la gente, es deciros, a decirlo?

Sí, hay empresas que se dedican a ello.

Normalmente esto va más por eventos,

algún patrocinador, alguna empresa

que premiera a alguien, no hacer un premio,

hacer un regalo, y hacen esto.

Porque si no, no sé la cantidad cuánto estaba,

pero en torno Carlos a los 1.000€ el kilómetro.

Sí, bueno, ha subido a 1.500€ el kilómetro.

¿Ah, bueno?

Una vuelta te sale de 6.000€.

¿Cuántos kilómetros?

Sí, 6.700€.

5.000€.

6.000€ en un Fórmula 1.000€.

Sí, sí, sí.

¿Media voltadas?

Sí.

No, no puedes dar media vuelta.

No pagar más.

Pero yo no sé, yo sinceramente,

el patrocinador, entonces,

que nos invitó a 25 periodistas,

no sé lo que costó aquel evento.

Y dimos dos vueltas cada uno en un Fórmula 1.

Más luego el curso de conducción de monoplaza previamente.

Sí, sí.

Era muy divertido, porque eso fue bastante profesional.

Hacías una vuelta con un monoplaza, el Fórmula 1,

y te cogieron unos ingenieros,

y te analizaban las telemetrías.

Oye.

Y te decían lo paquete que eras.

Termino la sección, Antonio.

¿Echas de menos viajar?

Ahora has decidido hacer los grandes premios

desde Movistar.

Perdón, desde Dazón.

En las instalaciones de Movistar

se produce la Fórmula 1.

¿Echas de menos viajar o no?

A ver, si me dices,

¿tienes que hacer toda la temporada de Fórmula 1?

No, de ninguna forma.

No podría aguantarlo.

¿Cuántas hiciste viajando?

Trece.

Y hacer alguna, no me importaría.

Alguna.

Más que nada, por también mantener contactos,

y hablar con gente,

y sentir un poco lo que se cuece ahí dentro.

Porque están a tanta distancia,

a veces te sientes un poco apartado.

Pero tienes que generar información

contactando a la gente,

mandando mensajes,

y es un poco más complicado.

Vivir alguna, sí.

Todas, no.

Ahora que es una locura.

Ahora son 24 carreras para el próximo año.

Hay problemas en los equipos de Fórmula 1,

porque tienen que dividir equipos,

hacer dos equipos de trabajo,

porque ya, familiarmente, personalmente,

es insoportable para ellos.

Es un año entero,

es casi un año entero fuera de casa.

9 meses fuera de casa, prácticamente.

En las familias.

Esto es una cosa que no...

Yo creo que alguna vez tendrá que parar

o reducirse el número de días.

Bueno, tengo que decirte que Antonio

le gusta el plan que hago yo,

de 11 al año.

Tú haces 11 caras.

11 igual son muchas.

¿En las ideas por ti?

Sí, claro.

No, las eliges su ángar.

¿Cómo que las eliges tú?

No, yo elijo...

Yo elijo...

Y luego, suán caro decirles.

Esa es una maravillosa manera de decirlo.

Esa es una maravillosa manera de decirlo.

¡Sóan caro decirlo!

Yo lo digo para luego ya.

Qué maravilloso es.

Oye, una curiosidad.

Digo, los empleados de los equipos, no los pilotos,

cobran en plan dietas y por noche fuera de casa

y todos los equipos cobran más o menos lo mismo,

¿no?

Los empleados, digo.

Sí que hay dietas, ¿eh?

Y luego, por ejemplo,

hay un trabajo que está muy bien pagado,

lo que es muy sacrificado,

que es las camareras de los Hospitality.

Pero por evento están cobrando 5.000 euros.

Lo que pasa es que trabajan 12 horas cada día.

Sí, y es una presión tremenda.

Pero son siempre las mismas.

¿Era de cada país?

¿Y camareros?

No, no.

Que hagan todo el año y muy pocas.

Claro.

Son 24.

Pero, por ejemplo, que hagan toda Europa,

y que hay muchas y luego sí que es verdad

que hay una responsable que suele ser

la que está al frente,

que está en todas las carreras.

Eso que había oído yo,

que el catering de la Fórmula 1,

al menos en Europa,

era una empresa de aquí española.

¿Eso es así?

No, no.

Es una austriaca.

Si pertenecía a Nikilauda.

Ah, no, perdón, perdón.

Que es que el catering de la Fórmula 1

era la que ponía el catering en el tennis

de Madrid.

En mutua, sí.

Y tiene muchos españoles.

Eso es.

Eso me suena a mí.

Y, de hecho,

creo que la jefa, sobre todo,

del Pado Club,

que es como lo más caro que existe

en la Fórmula 1 para Megabibs,

buena parte de los empleados

y la responsable máxima son de España.

Antonio, me han encantado el souffle.

Hemos aprendido.

Ha sido súper bueno.

Está bien.

Un poco de carreras,

pero vamos a ver otras cosas.

No, no, no.

Así es interesantísimo.

Cuando no hay carreras,

precisamente,

como vosotros.

¿Sabes qué pasa?

Que vosotros,

como lleváis en este mundillo

tantísimo tiempo,

lo habéis contado tantas veces

y tal,

esto,

para los que no son expertos

en Fórmula 1,

pues también está muy bien.

Yo haría esto

incluso cuando hay carrera.

Está muy bien.

Está muy bien.

Hay que leer libros.

Un abrazo, Antonio.

Gracias por el souffle.

Gracias, Carlos.

Un abrazo.

Hasta luego.

Compañeros,

un abrazo a todos.

Un abrazo.

Me quedo con Josepho.

No, Luis, no.

Luis, no.

Ahora el kilómetro 42.

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