Todo Concostrina: Acontece que no es poco | Muerte y explosión del papa nazi Pío XII

Cadena SER Cadena SER 10/9/23 - Episode Page - 18m - PDF Transcript

En la ventana,

acontece que no es poco un relato personal de la historia con nieves con costrina, cadena ser.

Hola nieves, buenas tardes. Buenas tardes, Carlos.

Muy bien, muy bien.

Tengo yo siempre una gran curiosidad por saber cómo empieza las semanas.

Eso se lo comento a los oyentes, porque yo sé que ella, cuando nos despedimos los jueves,

empieza a pensar, empieza a tramar, empieza a rebuscar.

Y como tiene más tiempo, pues siempre que, en fin, encuentra temas sugerentes.

Hoy, por ejemplo, algo que no ocurre todos los días, que se muera un papa.

Y no un papa cualquiera.

Uno que así de noticia hace poco y no precisamente para bien.

Y te diré si me permites que como he estado en Ayariz,

con una gente estupenda que abre la misma...

Qué lugar, Ayariz, maravilloso.

Qué maravilla y cuántos oyentes tienes allí.

Tenemos.

Pues tenemos, vale.

Tuve tiempo de darle muchas vueltas al coco, dije.

Con la cabeza relajadita me ha salido esto.

Porque es que hoy, hace 65 años, que cascó el papa nazi, piodoz.

Piodoz, ¿eh?

Y mucho tardó en morirse, este pollino, para lo dicho que era.

Claro, esto lo decías hace unos años y ya estábamos a vueltas con las faltas de respeto

y que como se puede hablar, ha sido un papa.

Pero bueno, ya está más que demostrado que este tipo,

de nombre civil Eugenio María Giuseppe Giovanni Pacelli,

que pese a ponerse de nombre Pio, tenía de persona piadosa lo que Pacirín,

de físico cuántico, bueno, pues era un canalla.

Era un hipócrita, que esto no es nuevo para ser papa.

Y lo más grave, cómplice de los nazis.

Así que al final resulta que por casualidad desde la vida,

piodoz tuvo la muerte que mereció.

Porque explotó.

¿Cómo?

Explotó.

¡Explotó!

Literalmente, explotó dos días después de morir.

Y es una pena que no se enterará porque ya estaba muerto.

He dicho que tenía...

¿Explotó?

Sí, explotó, explotó.

Lo vamos a ver, no se lo pierdan, que es tremendo.

El 9 de octubre de 1958, Piodoz murió en el palacio apostólico de Castel Gandolfo,

que es ese casoplón, unos pocos kilómetros al sur de Roma,

con unas vistas magníficas al lago albano,

donde los papás se instalan a vivir como curas

para pasar sus fines y sus vacaciones.

La muerte del papa nazi fue un punto de inflexión,

además en muchos asuntos.

El Vaticano acabó boca abajo,

aunque la mayor parte de los fanes,

vamos, Kenny se enteró,

porque estaban observados con la muerte del líder,

creyendo que se había muerto un tipo divino.

Pero en las circunstancias de su peripecia a posmorten

provocaron un cambio en el protocolo funerario de los papás.

Toda esa parafernalia sacra,

con la que intentan rodear la muerte de los ventriloquos de Dios,

se les fue al garete con Piodoz.

Quedó al descubierto el gran teatro,

que es el Vaticano,

y la gran farsa que representan sus actores.

Yo he oído a lo de la explosión,

y quiero que lo cuentes,

pero decía antes que,

así de noticia, este papa hace poco y no para bien.

Recordemos que ha quedado al descubierto hace apenas un mes,

que Piodoz se fue,

y que se fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

y que fue,

de Belzec, que este creo que estaba en Polonia. Es una carta que ha encontrado un archivero

y en la que también se hacía referencia a los campos de exterminio de Auschwitz y Dahau.

Y esto lo han contado como si fuera algo nunca sospechado. Es como cuando pretenden hacernos

creer que lo de los curas violadores o abusadores y pederastas es una anomalía extraordinaria

de ahora, no, pero si llevan para...

Leva al país la historia de los cinco últimos casos que afectan al avispado de Malaga y

que no hay manera de dar explicaciones ni respuestas ni...

Y que no es de ahora porque es que llevan sin dar explicaciones desde que saltó la pederastia,

que ya estaba antes, pero desde el siglo XIX. Y siguen ahí como si esto fuera algo extraordinario.

No es extraordinario, es lo suyo, es lo habitual en ellos. Bueno, pues llevan practicando esa

crueldad con total impunidad. Y lo de la complicidad con los nazis se supo desde el primer momento.

No solo se sabía que el Vaticano entero miró para otro lado durante el holocausto,

es que cuando acabó la guerra, desde el Vaticano se facilitó la salida de los nazis desde Europa

y América. La famosa ruta conocida como Ruta de las Ratas, que siempre digo que me lo apunto

para contarlo y nunca lo cuento. Ya no voy a tardar mucho.

En 2020, además en plena pandemia, como el Vaticano es un estado, además de dictatoriales,

también muy tramposo y retorcido, aprovechó ese año en el que el mundo estaba en otras

cosas para desclasificar miles de documentos entre los que se encontraban 2.700 referencias

de entre los años 1939 y 1942, competiciones de ayuda de familias y grupos de judíos que

se habían convertido al catolicismo porque los nazis los estaban exterminando, ni puñetero

caso se hizo desde el Vaticano. Así que, ¿qué quieren que le diga? ¿Cómo no nos vamos

a alegrar de que el Papa nazi se muriera y encima explotara?

A ver, lo de la explosión ya llegará. Vamos por partes. Primero, ¿este hombre de que murió?

Este murió de un infarto. Esto, hasta ahí todo, digamos, reconocible, ¿no?

Sí, esto se muere de un infarto. No fue un infarto fulminante, afortunadamente, porque

así sufre un poquito. Le arreúne un infarto y estuvo muriéndose unos días. Unos dijeron

que el ataque fue por exceso de trabajo y otros más fantasiosos dijeron que lo castigó

su Dios por haber negado ayuda en la cacería de judía. Los dos cosas lamentablemente son

mentiras, lo de Dios y lo del trabajo. Ya vamos a avisar una cosa. Lo que está viniendo

es un poquito asqueroso. A ver, ¿qué de advertido? Cuando un Papa muere, lo primero

que se hace es embalsamarlo porque tiene que aguantar varios días de exposición ante

los fans. No tiene que oler. Con el Papa nazipío XII ocurrió que al embalsamador,

que también fue su médico personal, le salió la venacreativa y quiso emplear un nuevo método

de embalsamamiento que según él iba a dejar al Papa fetén. El lugar de extraer

los fluidos corporales y mantener el cuerpo en frío, que es lo que hay que hacer, el

médico, que se llamaba Ricardo Galleghi-Lisi, envolvió al Papa en plástico, lo envolvió

en una especie de celofanco papel fiel, después de envadurnarlo con especias y con hierbas

aromáticas, como cuando pones a macerar un pollo para que pilles sabor, lo dejas ahí

y el Papa se maceró, sí, pero se maceró malamente más que macerarse fermento.

Oye, pero va a ser una cosa, si este médico decidió cambiar el protocolo que se seguía

habitualmente, tendría conocimientos forenses ¿no? No tenía ni idea de nada, era médico.

A ver, seguida vamos a ver que no solo era un inepto como médico, es que además como

humano era un chorizo, después de esto lo vemos. La fórmula empleada por el médico

Chapucero, por Ricardo Galleghi-Lisi, lo que en realidad provocó fue que se acelerara

la putrefacción en lugar de frenar. Pío 12 comenzó a descomponerse a toda velocidad,

nunca se había visto un Papa pudrirse con tanta prisa y lo hacía además en las mismas

narices de los que ya estaban imaginándose el desastre que se avecinaba. El pecho papal

explotó, explotó por la acumulación de gases, se le desprendió algún dedo de la mano,

también se le descuajaron la naricia, aquí fue tremendo, el cuerpo empezó a ponerse

verde negruzco o negro verdoso, pues según lo miremos, y a los guardias suizos que custodió

en el cuerpo, tanto en el traslado desde Castel Gandolfo a San Pedro, como en la exposición

en San Pedro del Vaticano, tenían que relevarlos cada 10 o 15 minutos porque caían desmayados.

Del tufo. Horrible, aquello era horrible, atufados por la peste, fasqueroso todo, y todo porque

el médico y uno de los colegas del médico decidieron emplear la técnica en balsamadora

que se creían ellos, y ahora viene el chiste, se usó con Jesucristo.

Pero de dónde sacaron los datos de esa supuesta técnica, en algún lugar tendrían que estar.

Esta es la novela, la Biblia, esto tenía un gravísimo error de base, que es mentira,

que lo del embalsamamiento es un invento bíblico que dice que José de Arimatea y

Nicodemo prepararon el cadáver de un crucificado, de más que dudosa existencia,

y que ese cuerpo lo prepararon con mirra, álue y aceite de nardo, pero eso fue solo un recurso

literario de la novela, eso es un cuento chino, nada de eso ocurrió de verdad, ni lo del entierro,

ni lo del álue, ni lo de la tumba, ni lo de que resucitó nada.

Si es cierto que la mirra, el nardo y el álue servían para aromatizar,

para tapar el mal olor de los cuerpos, esa era la costumbre, pero eso ni preserva.

Pero no conserva, no conserva, y conservamos, tú haces un buen escabechao y eso conserva.

Y menos si estás envuelto en el filo, no respira nada.

Eso era tremendo, aquel embalsamamiento chapucero fue un desastre y por eso el papa fermentó y explotó,

que por dios y por la vieja en donde se ha visto que un papa explote.

Yo no había de hongas, ni un papa ni nadie, o sea, no, no.

Este exploto, lo suyo sería que el papa hubiera sido trasladado desde Castel Gandolfo hasta San Pedro

del Vaticano en olor de santidad, y en olor, sí, sin duda, porque la madre que parió al papa que pestilencia.

Más o menos, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé,

no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, No sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé, no sé

este hombre debería haber acabado en realidad detenido, lo que pasa es que

como el Vaticano es lo que es y allí se lo guisan y se lo comen, lo que contamos

ahora se supo o se supo después. Ricardo Galea Chilisi carecía también

de escrúpulos y llegó a dos acuerdos con la prensa para sacar mucha pasta a

cambio de un par de exclusivas. Por un lado negoció con una agencia de noticias

italiana darle la exclusiva de la muerte de Pío XII antes de que la anunciara

oficialmente el cardenal Camarlingo que es el que tiene que hacerlo. El plan era

que en cuanto al Papa Cascara el médico abriría una ventana concreta del palacio

de Castel Gandolfo y que esa sería la señal pero resultó que en aquellos

primeros días de octubre de 1958 hizo mucho calor, como ahora, sí hizo mucho

calor como yo creo que menos que ahora pero con todo y con eso a orillas del

lago la humedad bueno pues alguien decidió abrir las ventanas para que

corriera el aire. La agencia confundió la señal lanzó la exclusiva y los medios

del mundo mataron con sus titulares a Pío XII antes de tiempo. No fue esto lo

más grave, lo más gordo se descubrió después cuando el semanario francés

París Match publicó fotos de Pío XII en la cama mientras estaba agonizando y

otra vez muerto y otras imágenes muertos. El canalla del médico se había

puesto las botas haciendo fotos y luego vendiéndose las a la revista así que si

para algo sirvió todo lo mal que lo hizo el médico de Pío XII con lo de las

fotos y el embalsamamiento fue para que los siguientes papas tomaran nota de lo

que iban a impedir que ocurriera. Juan Pablo II prohibió tomar imágenes salvo

para la documentación interna del Vaticano y Juan XXIII prohibió que

ningún embalsamador creativo se le acercara. Se buscó el suyo propio lo

tenía porque él no quería explotar así que sí bueno sirva este acontecido

maloliente y asqueroso sobre el Papa nazi como prueba de que un pontífice por

muy sumo que sea cuando se muere apesta más que un ateo.

Y luego también sino es el tema de hoy pero qué interés en publicar esa foto no?

Que valor tendrá a poner una persona agonizando. Pues París Match se puso las

botas con las ventas que tampoco se veía gran curso, salvo a Pío y a la cama y ya está.

Bueno Nívez mañana más. Venga un beso, hasta luego. Gracias Carlos.

No no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no

no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no

no no

no no no happened

no no no no no girl

Breathe, breathe

Breathe, some soul in me

Breathe, a gift of love to me

Breathe, light to me for me

To see to make me free

Breathe, your honesty

Breathe, your innocence to me

Breathe, your word to set me free

Breathe to make me free

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El 9 de octubre de 1958 el papa Pío Xii murió en el palacio apostólico de Castel Gandolfo. Nos lo cuenta Nieves Concostrina.

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